Con un cuadrante del modo night-shot de la cámara digital, la directora Carolina Moscoso trazó un camino conceptual y formal hacia un hecho decisivo del pasado. Tres estados lumínicos animan —advertidos al inicio— este diario de sanación: oscuridad, luz encandiladora y la penumbra. Ninguno de los tres brinda, de modo natural a la mirada, nitidez ni certeza. Pero en el punto de vista en clave nocturna, cobran uniformidad cromático-emotiva, contraste y claridad.
Desandar el camino que ocho años antes recorrió junto a su agresor por la costera de un balneario cerca de la ciudad de Valparaíso y el resto del trayecto hasta los matorrales aciagos, aceleró el trasegar legal, afectivo, psicológico y existencial, en todo caso, con repercusiones en tiempo real ante la cámara y expresivas en lo cinematográfico.
Documental, autorretrato, ensayo cinematográfico de denuncia. Esta luminosa ópera prima reflexiona sobre un pasado dinámico, maleable con el tiempo y el pulso artístico, y un presente visto como materia prima de algo posterior. El epifánico nacimiento de un ser humano a través del visor nocturno —secuencia medular en la película— desjerarquiza la imagen y nos lleva al núcleo de la tribu para luego desembocar, entre otros afluentes, en una variante del perdón. En un memorable ejercicio de capoteo al trauma, con recursividad de material, soltura en el montaje y el relato oral, Visión nocturna nos recuerda esa contraparte de la luminosidad que ameritan ciertas visitas
VISIÓN NOCTURNA NIGHT SHOT
CHILE 2019
78′ hi8, dvcam, hd color
Dirección Fotografía Carolina Moscoso Briceño Guion Carolina Moscoso Briceño María Paz González Edición Juan Eduardo Murillo Sonido Mercedes Gaviria Música Camila Moreno Reparto Carolina Moscoso Briceño
Producción Macarena Aguiló Compañía Productora El Espino Films