En su regreso a la Cátedra Bergman, el icónico director portugués abordará su universo fílmico, cuyas cualidades humanas y estéticas se fincan en el territorio de su obsesión: el barrio marginal de Fontainhas en Lisboa, desaparecido tras la demolición de sus viviendas y los espacios habitados por el grupo de gente que actúa en sus películas. Es ahí donde Costa ha pulido su ritmo y metodología de trabajo, pero sobre todo, es el escenario del encuentro con sus protagonistas: Vanda, Zita y, por supuesto, Vitalina Varela. Una conversación para recordar el poder del cine y sus historias, el peso político de sus imágenes y la belleza de aquello que el sistema intenta reducir a polvo.