Antropología de lo visual, con Véréna Paravel

Escrito por Ricardo Ángeles

El miércoles 4 de junio, la Sala Luis Buñuel del Centro de Capacitación Cinematográfica fue sede de la clase magistral Antropología de lo visual, impartida por Véréna Paravel—cineasta, antropóloga visual y artista franco-estadounidense—reconocida internacionalmente por su trabajo innovador en el cine documental experimental.

Paravel, quien formó parte del jurado de la Competencia Internacional de FICUNAM 15, permitió que las imágenes hablaran por sí mismas. A lo largo de la sesión compartió fragmentos esenciales de su filmografía, deteniéndose especialmente en Leviathan (2012), aclamado documental codirigido junto a Lucien Castaing-Taylor. La película propone una experiencia sensorial que desborda los límites del documental tradicional, desafiando al espectador a sumergirse —literalmente— en el mar, en una exploración profunda de las relaciones entre humanos, máquinas y naturaleza.

Con una mirada aguda y reflexiva, Paravel explicó los desafíos estéticos, éticos y técnicos que atravesaron el proceso creativo de esta obra clave del Sensory Ethnography Lab de Harvard.

La clase inició con un gesto íntimo: Paravel preguntó si podía sentarse en el centro del escenario, en su silla de directora. El público asintió, y ella agradeció la disposición general para continuar en inglés, sin traducción. Ese tono directo y horizontal marcó el ritmo de una conversación visual profunda.

Durante la charla, habló de sus primeros acercamientos al cine desde la antropología y de los procesos de colaboración inmersiva que definen su obra. “Tuve que aprender a colaborar verdaderamente en los proyectos”, compartió. “Tenía que ganarme la confianza de las personas. Pasé meses regresando al mismo lugar, estuviera inundado, nevara o hiciera un sol abrasador. Incluso cuando era casi imposible grabar, volvía una y otra vez, hasta que quienes habitaban ese espacio me permitieron compartirlo todo”.

Uno de los momentos más intensos de la sesión fue la proyección de fragmentos de Leviathan, obra cumbre de Paravel y Castaing-Taylor. Mientras compartía estas imágenes hipnóticas, la cineasta comentaba tanto la construcción formal del documental como las inquietudes conceptuales detrás de ciertas secuencias, revelando su trasfondo estético.

Leviathan representó para nosotros la posibilidad de redistribuir la atención, de descentralizar la mirada humana y abrazar, como perspectiva, aquello que está más allá de lo antropocéntrico”, afirmó. Una frase que resume el espíritu de la película: una inmersión radical en el caos del océano, donde la cámara se entrega a lo sensorial y al entorno sin jerarquías, otorgando igual relevancia a humanos, máquinas, animales y elementos naturales.

Más adelante, Paravel abordó la creación de Somniloquies (2017), también codirigida con Castaing-Taylor. Este inquietante ensayo audiovisual explora los límites difusos entre cuerpo, voz e inconsciente, a partir de grabaciones reales de sonambulismo.

“La idea de conectar un micrófono directamente al inconsciente de una persona es, en muchos sentidos, políticamente incorrecta. Es violento, es crudo… y, al mismo tiempo, profundamente fascinante”, explicó. “Solemos aferrarnos a una idea fija de identidad, pero al escuchar estas voces en estado de sueño, entendemos que podemos ser cualquier cosa: una mujer, un niño, una abuela. No lo sé… somos todos y ninguno a la vez. Pasamos por todos los estados emocionales, como si atravesáramos la experiencia de toda la humanidad en un solo cuerpo”.

Al cierre, compartió detalles sobre sus próximos proyectos y las tensiones que actualmente la movilizan como creadora audiovisual desde una mirada antropológica.

Más que una clase magistral, la sesión se convirtió en una conversación íntima con la directora, donde se rompió la barrera entre ponente y audiencia. Un intercambio genuino que concluyó con una reflexión esencial: el cine no se explica desde la teoría, sino desde la experiencia.